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Aumento de Glúteos
Se trata de una intervención en auge en los últimos años. Se implantan prótesis de gel de silicona similares a las que se implantan en las mamas, pero de mayor resistencia y cohesividad, con el fin de realzar y aumentar el volumen de las nalgas, haciéndolas más firmes, torneadas y realzadas.
INDICACIÓN
Pacientes que tienen unos glúteos aplanados y sin proyección, sobretodo en la visión de su perfil, tanto en mujeres como en hombres.
ANESTESIA
Anestesia general o epidural. Es imprescindible para la introducción de la prótesis que el músculo glúteo mayor esté totalmente relajado.
TÉCNICA
A través de una incisión en la línea interglútea (entre las dos nalgas), se accede al músculo Glúteo Mayor, al que se atraviesa, creando un bolsillo bajo el mismo. Este hueco, que alojará la prótesis, se sitúa en la zona donde usualmente se lleva la cartera en un pantalón, de manera que, una vez introducida, la prótesis no estará en un punto de apoyo cuando el paciente se siente.
Existen dos tipos de prótesis: redondas y en forma de almendra. La elección de una u otra dependerá de cada caso.
El cierre de la intervención se realiza por planos: músculo, grasa y piel con sutura intradérmica, quedando una cicatriz fina y disimulada en el surco interglúteo.
DURACIÓN
Aproximadamente una hora y media a dos.
POST OPERATORIO
Al paciente se le coloca una venda adhesiva para la compresión de la zona e inmovilización de la prótesis, y se le permite ponerse de pie en las primeras horas. Ahora bien, aunque el paciente pueda andar después de la intervención, debe guardar reposo acostado boca abajo, evitando colocarse de lado para no someter la sutura a tensión. Durante la primera semana no debe dormir boca arriba (espaldas) para no desplazar la prótesis ni tensionar en exceso la cicatriz.
La higiene y desinfección de la herida durante los primeros 7 a 10 días, debe ser exquisita, pues una infección, que en cualquier intervención sería perjudicial, en esta sería mayor por la virulencia y proximidad de los gérmenes fecales.
El paciente se puede sentar, teniendo precaución de no presionar o desplazar la prótesis.
Se puede hacer una vida normal sin esfuerzos a las 48 a 72 horas, evitando caminatas largas las dos o tres primeras semanas.
RIESGOS
Los propios de toda intervención quirúrgica: hematoma, seroma, infección, apertura de la herida, alteraciones de la cicatriz, etc. Así como los característicos de los implantes de glúteos.
Estos riesgos son: contractura capsular con asimetrías o cambios de forma, exudado de gel, calcificaciones, alteraciones de la sensibilidad, movilización, rotura de la prótesis, etc. Alteraciones neurológicas como parestesia, prurito, dolor, anestesia transitoria o definitiva y paresia.
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