blefaroplastia inferior

La blefaroplastia inferior corrige las bolsas de grasa y los surcos de los párpados inferiores

La cicatriz de la blefaroplastia inferior es mínima y pasa desapercibida

Los ojos se han convertido en los protagonistas de este último año. Así que no es de extrañar que la blefaroplastia inferior (y también la superior) se haya convertido en una de las intervenciones estéticas más demandadas. ¿Quieres saber en qué consiste?

La blefaroplastia inferior corrige las bolsas de grasa y los surcos de los párpados inferiores. Además elimina arrugas, pliegues y la laxitud provocadas por el paso del tiempo. El objetivo de esta operación es conseguir una mirada más descansada y juvenil.

¿Quién es el candidato para una blefaroplastia inferior? Hay personas más predispuestas que otras a tener bolsas en los ojos. Y esas bolsas les hace parecer mayores o que están siempre cansadas. La blefaroplastia inferior ayuda a mejorar su aspecto facial. Y sentirse mejor. Estas son las principales candidatas a someterse a esta cirugía. Pero también aquellas personas de entre 30 y 40 años, en las que empiezan a aparecer arrugas y quieren decir adiós al aspecto envejecido de su rostro.

La operación suele durar entre 30 minutos y una hora y se realiza con anestesia local y una sedación suave. Existen diferentes técnicas, dependiendo de la edad y de las características de la paciente. Por ello recomendamos acudir a una clínica, como Clínica Dual, que cuenta con profesionales expertos. Ellos analizarán tu caso y decidirán el abordaje idóneo para ti. Además, con todas las garantías de seguridad.

¿Qué técnicas existen? La blefaroplastia inferior puede ser transconjuntival y subciliar.

En la primera la incisión se produce entre los párpados y el globo ocular. Es la más indicada para los pacientes más jóvenes. ¿Por qué? Porque no tienen un exceso de laxitud en la piel y porque las bolsas no son tan pronunciadas. En esta cirugía no se toca la piel, lo que implica ausencia de cicatriz cutánea y una más rápida de recuperación.

La segunda opción, la blefaroplastia subciliar supone hacer una incisión cerca de las pestañas. Con ella eliminamos la grasa acumulada en las bolsas. Y también se eliminan arrugas. Es una incisión pequeña, que pasa desapercibida.

Como hemos señalado antes, ambas técnicas se realizan con anestesia local y no es necesario el ingreso hospitalario. De hecho, el paciente puede hacer vida normal en cuatro o cinco días. Aunque hay que tomar ciertas medidas:

  • Aplicar compresas frías o hielo durante las primeras 48 horas.
  • Estar la mayor parte del tiempo en reposo y con la cabeza elevada.
  • Si hay molestias tomar paracetamol.
  • Lavarse los ojos varias veces al día con suero fisiológico o infusion de manzanilla.
  • Proteger los ojos con gafas de sol durante unos meses.
  • No usar maquillaje hasta diez días después de la operación.
  • Tampoco hay que utilizar las lentes de contacto en, al menos, dos semanas.

Las complicaciones son mínimas. Sobre todo puede aparecer un ligero malestar, lagrimeo o intolerancia a la luz. También puede costar cerrar completamente los párpados. Y aparecer un leve hematoma. Son problemas que desaparecen a los pocos días.

Los resultados de la blefaroplastia inferior son muy notorios, porque se eliminan las bolsas debajo de los ojos y también los pliegues y arrugas. Además, más allá de la estética, mejora la calidad visual. Son unos resultados que se perciben rápidamente.

En Clínica Dual te garantizamos una mirada rejuvenecida y sin esos factores que la hacen más apagada y cansada. Además, nuestros profesionales podrán analizar si necesitas complementar la blefaroplastia inferior con alguna de las otras técnicas de estética para lucir un rostro más joven y radiante.

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