Las cirugía para corregir las orejas de soplillo está permitida en menores
Las orejas de soplillo causan muchos complejos
Orejas de soplillo, orejas de Dumbo… Si te han dicho esto alguna vez a lo largo de tu vida, quizá te consuele saber que compartes este singular rasgo con el 5% de la población. Pero sobre todo es importante que sepas que es posible corregir este defecto para siempre. Y así eliminar ese complejo con el que no estás dispuesto a cargar toda tu vida.
De hecho los problemas de autoestima son el principal motivo por el que la otoplastia es la única cirugía estética que está permitida practicar a menores. Eso sí, siempre con la conveniente preparación, el apoyo del entorno familiar y la coordinación del equipo médico, que ha de velar ante todo por la salud del menor.
En la mayoría de los casos el factor genético es determinante. Las orejas de soplillo son el resultado de un pliegue antihelicoidal subdesarrollado. Cuando el pliegue no se forma correctamente, hace que el borde exterior de la oreja -la hélice- sobresalga hacía afuera. La mayoría de las personas con orejas de soplillo también tienen una concha profunda, el espacio en forma de tazón justo fuera de la abertura del canal auditivo que empuja toda la oreja hacia fuera.
¿Cómo se corrigen las orejas de soplillo? La única solución definitiva es la cirugía. Si quieres cambiar la apariencia de tus orejas, ya sea para modificar su posición, ya sea para reducir su tamaño, deberás someterte a una otoplastia.
Es una intervención quirúrgica sencilla que suele durar de una a tres horas. Los resultados son inmediatos y permanentes. Se realiza bajo sedación en adultos, y con anestesia general en el caso de los niños. El tiempo de recuperación es de cinco días, a partir de los cuales el paciente puede retomar su rutina habitual.
El procedimiento consiste en conseguir una forma de la oreja más natural, realizando una incisión en la parte trasera de para extraer o esculpir, según el caso, una parte del cartílago. La cicatriz de la otoplastia, queda detrás de las orejas y es prácticamente invisible.
Después de la cirugía para corregir las orejas de soplillo, el cirujano prescribe el tipo de vendaje, para tapar y ayudar a mantener la nueva posición durante el tiempo de recuperación. Es importante seguir al pie de la letra las instrucciones del cirujano con respecto al vendaje y los cuidados posteriores.
Es normal que en el momento de retirar el vendaje, las orejas presentarán una ligera inflamación que irá remitiendo a lo largo de los siguientes días. Los puntos de sutura se retiran a los 10-12 días.
Aunque los riesgos son pocos, no son inexistentes. Los más habituales son hematomas, cicatrices queloides o infecciones. A ello se suma que entre el 5% y el 7% de los casos se produce lo que se conoce como recidiva de la deformidad. Es decir, la tendencia de la oreja a volver a su posición inicial. Si esto sucediera, es conveniente esperar unos seis meses para reposicionarla.
Por ello recuerda siempre acudir a clínicas que cuenten con un equipo médico profesional como el del Dr. Ricardo González de Vicente, así tendrás la garantía de los mejores resultados desde la experiencia, la profesionalidad y la aplicación de las últimas técnicas y tecnologías.
Así es que, si has decidido someterte a un otoplastia para dejar atrás tus orejas de soplillo, pregunta en Clínica Dual. Estaremos encantados de ayudarte a mejorar tu aspecto y tu calidad de vida.